Las criptomonedas son un medio de intercambio que funciona 100% digital, utilizan la criptografía para asegurar la integridad de las transacciones y controlar la creación de unidades, y se emite de manera descentralizada.
Para que algo sea considerado una criptomoneda, deben cumplirse estas 4 características:
La primera criptomoneda en crearse fue Bitcoin en el 2009. El pseudónimo que escogió su creador fue “Satoshi Nakamoto”, aún no se sabe si es una persona o un grupo de personas.
Nakamoto presentó un proyecto para crear un medio de pago electrónico directamente entre personas con transacciones más rápidas, seguras y sin la intervención de los bancos.
En dicho proyecto, Nakamoto explicó que para que bitcoin funcione, es indispensable el uso de la tecnología blockchain.
Las criptomonedas funcionan gracias a la tecnología blockchain. Al igual que internet, blockchain es considerado un avance tecnológico.
Así como Internet permite conectar inmediatamente a las personas, blockchain también hace algo muy innovador: descentralizar cualquier información.
¿Qué significa eso? Que cualquier dato puede estar disponible en muchos sitios y no solo en poder de unos pocos, como ocurre en los modelos centralizados de los bancos u otras instituciones.
La primera vez que se usó el término “blockchain” fue luego de la publicación del Whitepaper de Bitcoin.
La blockchain de Bitcoin funciona como un gran libro contable que está distribuido en una gran red de computadores en todo el mundo. En este libro contable se guardan las transacciones de BTC y existe una copia idéntica en cada computador de la red.
Pero también tiene una serie de características muy particulares que se aplican a otras criptomonedas.